¿Qué significa RPA (Régimen de Perfeccionamiento Activo) en aduanas?

El régimen de perfeccionamiento activo (RPA) en aduanas es un tipo de trámite en importaciones de países extracomunitarios, que permite un ahorro en el pago del IVA u otros aranceles de importación. Suena bien, ¿no? Aún así, estas tasas preferenciales tienen una serie de condiciones, que son principalmente el procesamiento de estos productos para su posterior exportación.

Estas son principalmente las condiciones para acogerse al RPA. El régimen de perfeccionamiento activo está diseñado para empresas que importan materias primas o componentes que serán utilizados en la fabricación de productos que luego serán exportados. Deben ser productos que se utilizarán en la producción, transformación, ensamblaje o reparación, es decir, materias primas.

Las condiciones del régimen RPA también excluyen aquellos productos importados para la venta en el mercado local, se plantea para bienes que serán exportados en un periodo limitado de tiempo. Estos dos requisitos son los esenciales, o de base, que se unen a una serie de requisitos concretos que analizaremos en este artículo.

¿Cuáles son los objetivos de la RPA?

A grandes rasgos, este régimen específico tiene su objetivo en fomentar la producción y la transformación local, así como mejorar la competitividad de las empresas locales en términos de exportación. Estas son los beneficios y las ventajas del RPA:

• Al fomentar la producción y la transformación local, el RPA promueve la generación de empleo, el desarrollo de la industria local y la creación de productos con un mayor valor agregado.
• El RPA mejora la competitividad de las empresas locales al permitirles importar materias primas y componentes a costos más bajos y, a través del proceso de producción local, exportar productos finales de mayor calidad y valor.
• Este régimen también simplifica los procedimientos aduaneros y agiliza la cadena de suministro, lo que facilita las operaciones de importación y exportación para las empresas bajo el RPA.
• Al permitir la importación de productos semielaborados, el RPA puede atraer inversiones y tecnología extranjeras que benefician a la economía local.
• Automatización de la economía, y robotización de tareas repetitivas
• Estímulo a la Exportación: Por último, pero no menos importante, este régimen RPA impulsa la exportación al permitir a las empresas locales producir productos que sean más competitivos en los mercados internacionales.

En resumen, el Régimen de Perfeccionamiento Activo cumple sus objetivos del fomento de la producción local, la mejora de la competitividad de las empresas, la facilitación en gran medida de los procesos aduaneros y la promoción del comercio internacional.

¿Cómo tramitar el RPA?

Este trámite se puede hacer de una forma fácil, confiable y segura por parte de un agente de aduanas. Al final, externalizar esta tarea va a tener la ventaja de que la empresa importadora y exportadora podrá centrarse en el core de su negocio, y contar en que esta acción no le supondrá un problema. Podrá ahorrarse y olvidar cualquier tipo de gestión, pero disfrutando de las ventajas.

Se puede seguir el proceso simplificado o normal, y la documentación requerida para tramitar el RPA es el registro empresarial, la declaración de impuestos y estados financieros, el plan de negocio que explique las actividades bajo el RPA, la lista de productos a importar y exportar, los detalles sobre las instalaciones y la maquinaria utilizada y por último, cuerdos o contratos con proveedores y clientes.

Con ello, se deberá presentar esta autorización ante la autoridad aduanera, y estar disponible para auditorías y seguimiento constante por parte de la misma. En este sentido, contar con un agente aduanero suele ser la solución con mejor ratio coste/beneficio.

Condiciones necesarias para usar el Régimen de Perfeccionamiento Activo

A grandes rasgos, hay diferentes tipos de operaciones que encajan dentro de este régimen de perfeccionamiento activo, que son las siguientes: elaboración, montaje y acoplamiento, ensamblaje, adaptación, reparación, restauración utilización de mercancías, siempre destinadas a la exportación. Una vez cumplido esto, estos son otros requerimientos:

• La empresa debe registrarse en la aduana y obtener la aprobación para operar bajo el RPA
• Las autoridades aduaneras pueden realizar inspecciones y auditorías periódicas para garantizar que la empresa esté cumpliendo con las regulaciones del RPA
• Compromiso de exportar dentro de un período de tiempo especificado. Si no se exportan, pueden aplicarse sanciones o tarifas adicionales
• Obligación de llevar un registro preciso de su inventario, tanto de los productos importados como de los productos exportados
• A menudo, se requiere que el personal esté capacitado en los procedimientos específicos del régimen de perfeccionamiento activo y las regulaciones aduaneras

¿Crees que puedes acogerte al RPA? ¿Tu actividad empresarial encaja con las condiciones? Este régimen tiene múltiples beneficios, con lo que la complejidad documental no debe suponerte una barrera para ello. ¡Cuenta con asesoramiento aduanero y disfrútalo!